Nadie tiene tu nueva dirección. Nadie ha podido conseguirla. Ni siquiera sabemos dónde andarás o qué forma tendrás. Todos tenemos un poquito tuyo adentro todavía, y ahí depositamos todo lo que nos ha quedado por decir. Pero aún hay algo tuyo entre nosotros. Es ese pedacito de vos que nos dejaste. Ese rinconcito donde vamos amontonando letras, abrazos, canciones, besos, dibujos y también miradas. Ese lugarcito que suponemos, será el primero al que vengas a recibir todo lo que te debemos.
Ph: Humberto Salazar
Edición: Vb.
1 comentario:
Cuando las cosas vienen de lejos, de lugares a los que se llega con poca frecuencia, las palabras también llegan de más cerca... del centro.
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